jueves, 3 de octubre de 2013

Mariposas

El prado estaba cuajado de mariposas. Tamizaban los árboles esmeraldas con sus bellas alas de color azul, en fiero contraste con el cielo pastel. A lo lejos, el chirriar del columpio colgado del manzano la hace sonreír. Una cálida brisa se cuela entre los árboles, mece la fragante hierba y lleva hasta su nariz, juguetón, el fresco olor de la menta y la hierbabuena. Ella es feliz en su prado, rodeada de mariposas, de libros y poemas. Aquí no existe el tiempo, sólo las mariposas.

Los días se suceden en una perezosa y desordenada sucesión, mientras lee en su columpio o se refugia por las noches en la cálida cabañita de madera. Le gusta pasear por las lindes del prado, observando las fragantes flores y sus suaves pétalos. Le gusta escuchar el trino de los pájaros, armonía pura que se eleva entre las copas de los árboles que salpican el prado. Le gusta recoger las dulces manzanas que le ofrece con cariño el viejo y nudoso manzano, con la paciencia propia de un anciano milenario. Su pequeño prado lo tiene todo aunque… quizás le falte algo. 

Un ruido apagado la sobresalta. Algo ha caído en un extremo del prado, donde comienza el extenso y umbrío bosque. Ella se acerca y lo recoge. Es una gran hoja marrón. Se acerca el invierno, observa ella con pena. Él se acerca sigilosamente a ella por detrás y la abraza. Ella pega un respingo y deja caer la hoja seca mientras ríe. El sonido de su risa se eleva hasta el cielo. Ahora todo está en su sitio, todo está completo. Observan juntos la nieve caer en el gran bosque. Ella dirige su mirada hacia el prado y una pequeña mariposa se posa fugazmente sobre su hombro para huir rápidamente ante el soplo de él. Allí, en el prado, siempre es primavera.

Kira =^.^=
''Pienso que no hace falta decir estas cosas,
pero al verte sentí dentro mariposas''

- Rayden; Mariposas-